Este cuarto es muy pequeño para las cosas que sueña, que es todo lo que has querido y a la vez lo más odiado, ni blanco ni negro que entre los extremos siempre hay más espacio, el fallo es que sólo está lleno de kilometros y miedos. Es más débil de lo que cree y más fácil de lo que piensas, se esconde siempre tras un cuaderno camuflado tras el humo y ya está harta de ir siempre corriendo en contra y empujando, se pega a las ventanas buscando una lógica que rebaje algo de peso, no soporta las dietas pero sabe que los disgustos siempre vienen juntos, y no, claro que no, para sus carreras no hay ninguna explicación. No puede parar de repetirse cuánto de razón habrá en aquello de que para amar a alguien primero hay que amarse a sí misma...eso se le escapa del alcance, siempre fue una chica hecha para que la quieran y no tener que hacerlo ella misma, pero al final siempre se duerme sabiendo que son sus GANAS y el MIEDO. Lucha constante. La indecisión es el peor de sus fallos. Quizá es la distancia lo que le hace dar tantas vueltas, ojalá fuese como el chico de Bombon Chip que atraviesa las paredes y aparece a tu lado, o que sólo con desearlo aparecieses por sorpresa tú en el suyo. Ya tiene los 22 y todavía no sabe invertir en dolor e intriga tiempo y fuerzas de las que no dispone, sentarse a esperar aquello que no dura para siempre y que teme que la entierre y no la deje volver a andar, y aunque sabe que te necesita cada vez que te imagina se hace más y más pequeña. Y aún sigue sin saber que podría ofrecerte ella. ¿Por qué no llegaste antes? Cuando tú puedes yo no. Cuando ella pueda, tic tac tic tac....y sabe que a tu lado no podría tener el corazón mas rojo.
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